martes, 27 de diciembre de 2016

RICARDO MARTIN LAFFITTE "TRASMONTES"






Ricardo Martin Laffitte nació en San Martín de Valdeiglesias, el 4 de noviembre de 1908, de padre madrileño y madre francesa, maestra. Del primer tercio de su vida sólo conocemos sus tempranas incursiones taurina, de las que se cuenta con numerosos testimonios gráficos, en carteles y fotos, de actuaciones suyas como novillero en Salamanca (1930 y 1931) o Tetuán (1933 y 1935), donde torearía con Domingo Ortega y Vicente Barrera. Por el contrario, desconocemos cuándo llega a Jaén. Nos consta que era republicano y de izquierdas, y que, por pertenecer a algún cuerpo de seguridad de la República —Agente de Vigilancia, según su libro de Familia-, es destinado a Jaén, en concreto a la Diputación, en los años precedentes a la guerra. Sería allí donde, al poco de comenzar ésta, conocería a Encarnación Barea Siles, la que sería su esposa, por un singular juego de coincidencias. Finalizada la guerra los datos se confunden; su hija me afirma que Ricardo cs llevado a un campo de concentración a Francia. De hecho, la familia conserva numerosas "postales" enviadas desde allí. Sin embargo, su diversa procedencia (Perpignan, Toulouse, Burdeos, Marsella...) y el hecho de que en esos años de la postguerra nos consta que Trasmonte vuelve a los ruedos, toreando en muchas plazas del sur del país vecino, nos lleva a pensar que allí sc encontraba sencillamente exiliado, refugiado. Resulta muy, curioso leer en francés las reseñas relativas a sus faenas en tierra gala («En premier lieu, le vaillant matador Ricardo Martin Trasmonteavait á licher deux toros de l'ancienne race d. Salins...) 






Encarnación haría todo lo posible para que su marido volviera, sabía que era inocente y no había cometido delito alguno. Y sus gestiones dan el oportuno fruto. El 29 de junio de 1940 Ricardo Ie escribe desde Portbou: "Hoy llego a las 12 a nuestra querida España. Con esta fecha salimos para Figueras, donde nos tendrán hasta que Dios quiera, al llegar allí os pondré un telegrama". Martín Lafitte sería conducido al campo de concentración abierto en Algeciras, donde permanecería por algún tiempo. Una vez liberado viaja a Martos donde se encontraba su esposa, y aquí decide residir hasta el final de sus días. Curiosamente, como hemos podido ver, salvo en su época de prisionero en Cádiz, en todo su periplo vital está presente el Ricardo taurino. Su pasión por los toros.


Reanudó su contacto con los toros a partir de 1943, como banderillero, pero, obviamente, este trabajo/afición no era suficiente para sacar adelante a su familia, por lo que hubo de abrirse camino en otros campos. Durante mucho tiempo su principal fuente de ingresos fue una fábrica de capachos que tenía en su propia casa, en la calle Morería, donde llegó a tener contratadas hasta 20 personas. Más tarde vinieron duros momentos pues esta irregular actividad le propició duros reveses, por lo que se aventuró a la búsqueda de otros medios de sustento, como lo fue la representación comercial. Emociona ver sus agendas anuales, en las que, con preciosismo y minuciosidad, va registrando las faenas en las que interviene, fijando el día y la hora de la corrida así como la cuadrilla con la sale al ruedo. De hecho, Trasmonte, que formaba parte de la cuadrilla de Gitanillo de Triana, uno de los matadores que toreaban en Linares junto con Manolete la aciaga tarde del 28 de agosto de 1947 en la que el toro Islero acabó con su vida, fue uno de los que portó su féretro cuando éste salía del Hospital de los Marqueses para ser llevado a Córdoba. 


El cariño de la profesión queda también patente en las numerosas fotografías dedicadas por toreros, banderilleros o ganaderos que conserva su familia. Pero lo cierto es que fue esta, pese a su honda pasión taurina, el verdadero objeto de sus desvelos. En opinión de Lita,su hija, una cornada mal curada, sufrida por su padre en la boca en sus últimos años de banderillero, fue el origen del cáncer que acabaría con su vida. Murió en Madrid, d 7 de abril de 1963, a los 55 años y, como no podía ser de otro modo, en el Sanatorio de Toreros.

sábado, 17 de diciembre de 2016

ARMANDO CONDE



Armando Conde Delso nace en Quito un 1 de febrero de 1937. Torero de técnica, efectismo y valor. Nadie como él para las largas cambiadas y los pases con la muleta cambiada y por detrás en un péndulo torero. Tenemos en la retina el 'Jesús del Gran Poder' de 1973. Fue el primer ecuatoriano en ser reconocido con este premio que daba la comuinidad franciscana de Quito. Su campaña fue dilatada en la plaza Quito. Toreó 14 temporadas: 20 orejas, dos rabos, 20 vueltas al ruedo y 4 cornadas. Como un torero de casta tuvo un rosario de cogidas en toda su vida taurina. 

Como novillero su cartel en Valencia, España fue extraordinario. Llega a torear 36 novilladas en esa ciudad del Levante Español. Fue base de cartel. El 26 junio de 1961 se presenta en la plaza de Las Ventas de Madrid con ganado de Isabel Rosa González acompañado por José Osuna y Manuel García 'Palmeño'. Alternativa: 24 de septiembre de 1961 en Valladolid, España. El maestro Gregorio Sánchez en presencia de Curro Romero le cede el toro 'Temerario' de la divisa de Javier Molina Domínguez. Esa tarde cortó la oreja al toro de la alternativa y otra a su segundo. 

El domingo, 3 de junio de 1984 se da un festival homenaje póstumo a Armando Conde a beneficio de sus deudos. Su hijo (niño de unos ocho años de edad) a las seis de la tarde dió en su nombre, la última vuelta al albero de Iñaquito. Recogió el cariño del pueblo quiteño llorando a su torero. Armando Conde había muerto en marzo de ese año en Bogotá, Colombia --su segunda patria-- por causa de un derrame cerebral. Ese año se preparaba para despedirse del toro en Quito donde no se presentaba desde diciembre de 1979.

¡AQUELLOS DOS NIÑOS !



Aquí están, en Portugal, en una plaza cerrada con carros, nada más que Joselito y Limeño, la pareja que comienza a torear en el año de gracia de 1908, , Han ido a Portugal buscando campo para, sus hazañas. Han llegado allí de la mano de un guardia, como si fueran unos niños traviesos. Del guardia municipal sevillano José Martínez, que los vio debutar en Jerez el 19 de abril del mismo año, y que ha pensado, no en que se hallaba ante el coloso futuro de los toreros, sino en ambiciones más cercanas y concretas, en el interés de la parejita en las Plazas portuguesas y en su propio interés. Por lo pronto, ajusta los contratos y paga a los niños diez reales por corrida. Pero en aquella pareja de "niños sevillanos" iba en potencia y agraz el tremendo torerito, el amo del toreo dentro y fuera de los ruedos. Y en la tercera becerrada se planta. Ajusta por su cuenta el contrato de Campo Pequeño en mil pesetas y él se arregla con todos. Al "guardia", veinte duros, y al resto lo que es de ley, y no los ocho reales que José Martínez pagaba a los banderilleros. Y así, ante un mentor que ha visto como en un relámpago lo que tiene delante, torean catorce festejos más. Con unos novillotes que a lo mejor pasarían hoy por toros. Y aun en aquella época fueron suficientes para que la "seña Gabriela", más o menos enterada, mandase a por los chicos al peón Flavero. Pero ya se habían echado los cimientos —portugueses, para honra del Portugal taurino— de aquella pareja en la que iba un coloso.
En la fotografía puede verse claro. Limeño está en ella, muy marchosito para el objetivo de la máquina. Joselito está pan el suyo, que es ser el amo. Frunce el gesto y observa lo que les va a salir, para aprender lo que su portentosa intuición deja al oficio. Está ya en el sitio de responsabilidad, que no dejó nunca. A lo mejor ya ha puesto en su sitio al "guardia", y piensa además en las futuras contratas. Así fue lo que fue. Y ya se le adivina por debajo de esa guayabera blanca, por cuyas mangas asoman demasiado las muñecas; en su pantalón flamenco y en sus zapatillas. Pero, sobre todo, hay el gesto de ir a lo suyo, de estar en lo suyo, de ser el eje. Y tenía trece años.

POLIZONES


Estos dos personajes son José Ugaz en la izquierda y Gregorio Morote en la derecha, Peruanos que en 1948 se embarcaron de polizones en el barco italiano "Sebastian Cabot" en una travesia que duro desde el 5 de Junio al 12 de Julio de ese año. Llevaban por equipaje 3 trajes puestos uno encima del otro por no llevar maleta, tras una semana ocultos en la bodega y comiendo los viveres que parece ser por norma estaban en los botes de salvamento se presentaròn voluntariamente al capitan quien se lo tomó de buenas y les permitió finalizar su travesia hasta Barcelona, donde descendieron como dos turistas màs al llevar su documentacion en regla. El motivo de toda esta odisea no era ni mas ni menos que torear en España. Me consta que José Ugaz debutó en las ventas el 30 de Marzo de 1950 y Morote un año despues el 18 de Julio de 1951. Los dos eran del mismo pueblo Peruano,Monsefú,y ya tenian experiencia como novilleros.

PACO LARA


El matador de toros Francisco Lara Casado "Paco Lara" nació en San Fernando (Cádiz) el 18 de septiembre del año 1921, comenzó su profesión en los ruedos de la baja Andalucía e hizo su presentación en la Plaza de Madrid el 22 de marzo de 1942, estoqueando reses de Juan Belmonte con «El Yoni» y Mario Cabré. Mientras fué novillero no hubo temporada en la que dejase de sufrir una cornada grave, por lo que sus estadísticas no fueron, en el número de actuaciones, lo abundantes que pudieron ser, y al reducir sus actividades por causa de tales accidentes, temó la alternativa en un ambiente de olvido. Antes de recibirla, en 1945, realizó una excursión a Méjico, donde tuvo una provechosa actuación, y de regreso, en 1946, se dispuso a recibir la mencionada investidura, acto que tuvo efecto en esa ciudad el día 20 de junio de tal año, actuando de otorgante el mexicano Fermín Rivera y de testigo J. Belmonte Campoy, y lidiándose toros de de Dña Julia Cossío, de cuyo cartel fué complemento la lidia de un astado más, rejoneado por Conchita Cintrón.

No toreó más corrida que ésta en aquella temporada; de las doce que toreó en 1947 corresponden ocho a Colombia y cuatro al Ecuador, no sin sufrir en Quito una, cornada grave con fecha 9 de junio;
el 12 de octubre de 1947 en Bogotá para dar la alternativa a Pedro de la Casa “Morenito de Talavera Chico”. en 1948 tomó parte en seis, y sufrió otra cornada, el 11 de julio, en La Linea; de las tres toreadas en 1949 dos fueren en el Ecuador y una sola en España, en Colombia le da la alternativa a Rafael González Villa “Machaquito” en la antigua Plaza de Toros , como testigo estuvo Alvarez Pelayo. y posteriormente sólo se vestio el traje de luces en dicho continente americano.

Falleció: El 14 de noviembre de 1.988 fallece en la ciudad gaditana de El Puerto de Santa Maria a los 67 años de edad

sábado, 10 de diciembre de 2016

«VILLA CONCEPCIÓN»


Cuando el matadero municipal de Sevilla estaba a la vera de la Puerta de la Carne, el señor Garcés era ya empleado en el mismo. Tenía una hija llamada Concepción, en la que había puesto los ojos y el pensamiento un muchacho que quería ser torero. Y toreó el muchacho en Sevilla. José Vázquez se anunciaba en los carteles con el alias de «chico de San Bernardo», que en tal barrio había nacido y vivía el torero en agraz. Una noche, en el ruedo sevillano, un novillo le dio una cornada grave. Allí terminó la historia taurina del «chico de San Bernardo», y entonces pensó el mozo que era preciso dar nuevo rumbo a su vida. Había aspirado a todo en el toreo por ofrecer a Concha un bienestar que no era fácil conseguir por otros medios. No podía ser. La cornada le alejaba de los ruedos, y desilusionado, habló con la muchacha. 

No sospechaba José Vázquez que la noticia de su definitiva retirada de los toros fuera una gratísima noticia para Concepción Garcés; pero tal fue. Se había inaugurado el nuevo matadero sevillano, y, José Vázquez ingresó allí como empleado y al poco casó Con Concha Garcés. José fue nombrado capataz de nave y en su trabajo pasó muchos años sin más afán que el cumplimiento de su deber y  sin otra preocupación que sacar adelante a sus hijos. Y esto pudo ser porque a José Vázquez , que no tuvo suerte en el toreo. Dios le había concedido la gracia de casar con una mujer que si cuando mocita era la admiración de los muchachos por su belleza, ya casada podía ser espejo en el que se mirasen todas aquellas que pretendieran lograr el título de «mujeres de su casa». 


Siempre fue bueno para los suyos José Vázquez ; pero la esposa no se dejó ganar en bondad por su marido y en laboriosidad por nadie. La historia de doña Concepción Garcés es la historia sencilla de la mujer que sabia lo que era sacrificarse por los suyos, que  renuncio a todo por sus hijos y que no puso  límite a su bondad porque creía que el bien no tiene, frontera. Dios bendijo su hogar y le dio siete hijos. Pepe Luis, Rafael, que fue matador de novillos,Manolo, Consuelo,Antonio, Juan y Carmelita.En el hotel que la familia compró en la calle número 17 del barrio de Nervión, conocido por el nombre de «Villa Concepción»,se criaron los hijos en convivencia con  los abuelos paternos y el matrimonio. Nunca vio torear a ninguno de sus hijos .

viernes, 9 de diciembre de 2016

MANUEL NAVARRO


Manuel Navarro Salido, nació en Albacete, el 20 de julio de 1926. Comenzó a estudiar el bachillerato, aban­dona los estudios, para dedicarse al aprendizaje del to­reo, disfrutó siembre de la amistad de varios ganaderos, en especial de los Samuel Hermanos, por lo que gozó de ciertas facilidades para su inicio. Viste por primera vez el traje de luces en el año 1942, en Quintanar de la Orden, (Toledo) comparte cartel con Pepito Mateos, lidiando novillos de Manolo González. 

Dos años después, actuó en su primera novillada picada, en la localidad ciudadrealeña de Tomelloso, siendo sus compañeros de lidia, Ángel Luís Bienvenida y Pepito Mateos, se habló con elogios de su campaña de noville­ro. Se presenta en Madrid el 24 de junio de 1945, lidian­do novillos de de Claudio Moura, le acompañaron en la lidia, Rafael González Villa “Machaquito” de Madrid, “Chicuelo de Méjico” y Tacho Campos, los dos últimos mejicanos. Torea las temporadas 1946 y 1947, alcanzando nu­merosos éxitos y se anima a tomar la alternativa el 25 de julio de 1947, en plena Feria de San Jaime, se la conce­dió “Gitanillo de Triana” (Rafael), con la presencia de Luís Miguel Dominguín y Rovira, y toros de la ganadería de Villagodio Hermanos, el toro que lo doctoró se llama­ba “Limpiador”.


Este mismo año, confirma en Madrid, el día 4 de oc­tubre, en la corrida a beneficio de la Asociación de la Prensa, Domingo Ortega fue el padrino y los testigos, Luís Miguel Dominguín y Paco Muñoz, se lidiaron cua­tro toros de Antonio Pérez-Tabernero y cuatro de Carlos Núñez. Después del doctorado, aún toreo quince corri­das ese año, la temporada de 1948, fue la que más se vistió de luces, llegando a las cuarenta y siete. Tras once años como matador de toros, se retiró en Méjico, en el año 1958. Fue un diestro bastante castigado por los toros, con valor y buen corte, su simpatía personal se transmitía en sus actuaciones. Residió muchos años en Madrid, tambien en Jerez de la Frontera. 

En el año 49 y en el 50 bajan considerablemente los contratos y decide comenzar una nueva etapa. «Yo no quería ni podía permitirme el lujo de ser torero de café, contando batallitas». «Hice amistad con un empresario portugués y organizamos festejos en el extranjero. Se celebraron corridas de toros en Mozambique, Angola, EE.UU, y Filipinas». Se trataba de un iniciativa que jamás se había llevado a cabo, siendo pioneros en organizar festejos taurinos mas allá de nuestras fronteras. «Mi amigo que se llamaba Alfredo Ovella tenía un gran espíritu emprendedor y además era un hombre que respondía». Toda una aventura llena de anécdotas y curiosidades.