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miércoles, 6 de mayo de 2020

UNA CARTA PINTORESCA


"Hace ya unos años, y gracias a la amabilidad de mi buen amigo Gonzalo Segovia, de Jerez de la Frontera, me fue factible explorar el epistolario que conserva en su poder del conde de Casa Segovia, y dar a conocer unas cartas inéditas de Fernán Caballero, Tula Avellaneda, así como otra, buenísima, de Bécquer. Además, entre las que transcribí, entonces, no aireadas todavía, se encontraba esta que presento ahora, de Fernando Gómez El Gallo, que por su carácter pintoresco y singular y por la escasez de muestras semejantes en figuras taurinas del pasado siglo —en general, bien poco inclinados a coger la pluma— considero interesante. 
Fernando Gómez García "El Gallo"

Dicha misiva se la envía Gonzalo Segovia, desde Málaga, a su tía Mercedes, coleccionista de cartas. Está fechada en Montevideo a 12 de diciembre de 188S v dice así, textualmente, a excepción de algunas palabras para mi ilegibles, por muchas y pacientes vueltas paleográficas que les llevo ya dadas: «Mi querido amigo Domingo, deseo te alle bueno, llo llegué a esta con un biage feliz y sin ninguna novedad el mismo día que llegué toreé la primera y salí bien. Pero creo que no concluiré toda la corrida porque en Buenos Aires ay cólera y aquí no dejan entrar de fuera y todo los días disen que aquí hay alguno caso de modo que puede figurarte el miedo que ay en esta y no va mucha gente a los toros y aller lla no querían dar permiso para la corrida. Pero por fin lo dieron. Si proiven los toros salgo enseguida para España. Beremo lo que sucede, es todo cuanto tengo que desirte por oi...» (Aquí la frase a la que no pude cogerle la punta. Al parecer dice: «la torcía escogiendo surada pasa dava mí.») «Recuerdo a nuestro amigo chilindro Juan León Emilio Pener (?) y demás amigo y tu savé que te quiere como a un hermano... Fernando Gómez». Una rúbrica laboriosa y a continuación, de postdata: «Dime que torero ay ajustado para este año en esa. Bivo calle Mini nüm. 21. Recuerdo de toda la cuadrilla».
José Paúl y Angulo politico español

Lo primero en llamar la atención son las garrafales faltas ortográficas. Junto a la consabida s por c, la 11 por la y, las b por v, amén de un par de «hay» sin h. Pero, en fin, tampoco le demos demasiada importancia, sobre todo si no nos olvidamos de que también las tuvieron, y del mismo o parecido calibre, personajes de mucha mayor categoría y campanillas en aquel siglo. Por ejemplo, Frita En una carta del Conde de Reos al Conde de Lucena, pidiéndole un puesto en la guerra de África, veréis faltas peregrinas. Ni más ni menos que siete. A la misma Isabel II os será dado cazarle algunas. Natalio Rivas refiere que un gobernador levantino escribía a Nicolás María Rivero, en 1870: «hayer dominé la situación que se presentó dificultosa; si oy se repitiera...» Don Nicolás contesta, felicitándole, y le añade de colofón el siguiente consejo: «la hache es una letra muy moderna; no «a de ayer, es de hoy». Como veis, la ortografía andaba un poco en mantillas y cada cual tiraba, muchas veces, por la letra de enmedio. Lo que sí nos impresiona será ver a nuestro sevillano —38 años cumplidos-- torear el mismo día de su llegada, dos» pues de una travesía tan larga como Fatigosa, por muy feliz que quiera pintárnosla. Hoy que saltamos el océano a piola, por el aire, en cuestión de unas horas, deberíamos destocarnos ante las energías de aquellos hombres forjados a machamartillo. Femando, por otra parte, ha desembarcado sin suerte. SI cólera en Buenos Aires anda haciendo de las suyas y teme vayan a suspenderse las corridas que restan. No fue así, porque, según leemos en Cossio, torea, de nuevo, en Montevideo, el día 15, o sea, tres fechas más tarde, con la mala pata de que un toro le pega un puntazo en la mano derecha, al borde de la cicatriz producida por el estoque al entrar a matar a un Banuélos, en Madrid, en abril de 1884, un año fatal para Fernando, puesto que en Junio sufrió otra tarascada, y grave, de un Veragua. Si a ello unís el adiós definitivo de Guerrlta, su impar banderillero, que se pasa, a Lagartijo, y el «desastre» —así lo califica Cossio— de su última actuación en Madrid, en octubre, cuando la alternativa del Espartero, comprenderéis cómo Fernando Gómez, al que no soplaban buenos vientos, quisiera probar fortuna allende los mares. No era tampoco ni la primera ni la Última vez en visitar América. Ya lo habla hecho a La Habana, y aún volverla allí y a México en 1888. ¿Recordarla Rafael «El Gallo», en sus idas y venidas por los países hermanos, por las «Pompeyas del lujo asiático», cuanto contara su padre de aquellos entrañables tiempos? ¿Escribiría también, entonces, Fernando, a Gabriela Ortega? ¿Cómo serían aquellas líneas a Gabriela, caso de que fueran escritas, Rafael con tres años y Fernando con uno? (Gabriela vivía ya en Sevilla, donde se trasladaron a renglón seguido de nacer Rafael, en Madrid, en la calle de Los Madrazo, y fue después cuando decidieron irse a vivir a la huerta de Gelves. Fernando Gómez era un hombre do fácil, «calificada» palabra. En su casa, en su «universidad» sevillana, doctoraba como nadie al hablar de tauromaquia. [Se las sabía todas! [Qué bien decía y cuánta lógica tenían sus. argumentos!
El autor del articulo, Jesús de las Cuevas

En teoría muy pocos pisaron tan firme; la dificultad consistía, en explicarla, luego, en la realidad, en la arena de la plaza. Y ¡cuidado! que nunca careció de valor. De maletilla, de Gallito Chico, llegó a tenderse ante «Regalado», un toro feroz y enorme, y ya sabéis la receta in mortal de Pedro Romero: «Más se hace en la plaza con una arroba de valor y una libra de inteligencia, que al revés». Pero su fuerte estaba en la gracia, en la destreza. Nadie como él para dibujar las largas de rodillas. Llegó a hacerlas sin capote y con los brazos cruzados, y sus «recortes de cadera», sus quites a medio capote fueron inimitables. Idéntico salero fluía en su conversación a cada momento, y dichos y ocurrencias hicieron época. Esto aclara la sabiduría única de Joselito, su último hijo —contaba éste veintiséis meses al morir Fernando—, o la elegancia inmensa de Rafael, del que recuerdo siempre una frase de Waldo Frank: su chaquetilla de torero era como un frac al que le hubieran cuitado los faldones. Pero retornemos, por favor, a Montevideo, para ver pasear a Fernando Gómez, como un rey desterrado, por parques y. avenidas. Más bien bajito, las piernas algo zambas, la tez aceitunada y lorquiana. «Si provén los toros salgo enseguida para España». La Patria, que le tiraba, furiosamente, de las solapas. ¿Más quién organizó aquellas corridas? A guisa de curiosidad, Paúl y Ángulo, el revolucionario atormentarlo de Jerez, pensó, en algunos de sus años delirantes, dar corridas en Uruguay y en la Argentina, donde existía una tradición taurina que ascendía a la época colonial, y al que le tiente el tema de los toros allá, en el XVIII, que lea el artículo de Torre Revello, escrito en Sevilla e inserto en «La Nación», de Buenos Aires, en mayo de 1927, donde no falta ni sobra ni una coma. De cualquier forma, desconozco de quiénes fueron los toros, como también; quién pudiera ser ese Domingo al que Fernando quiere «como a un hermano» y al que dirige su sabrosa carta. En verdad, a Fernando Gómez no le disgustaba escribir. En la misma agonía, que sepamos; garabatea una misiva patética al compadre Guerrlta, encomendándole los hijos. «No los deje sin pan». Por lo visto, no sospechaba el futuro espléndido que Dios les tenía reservado. Porque figuraos el pan que irían a necesitar, andando el tiempo, aquel par dé fabulosos maestros de la tauromaquia, que crecían, entonces, a su alrededor, en el aire mágico de la Huerta de Gelves".
Jesús DE LAS CUEVAS ABC SEVILLA 22-09-1965 página 11

1 comentario:

  1. Normal que en esa época se tuviera faltas de ortografía, y más cuando eran gentes sin estudios en la mayoría.
    Hoy en día también hay mucha gente que sigue dando patadas al diccionario, y no sólo comete faltas, si no que apenas sabe usar los signos de puntuación ni escribir frases coherentes (como pasa en éste blog, donde a veces es casi imposible hilar las frases debido a ésas faltas)...

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