sábado, 15 de febrero de 2020

MANUEL CORZO ANDALUZ "CORCITO"




“Corcito” nacio el 24 de octubre de 1880 en el popular barrio sevillano de Triana. Manuel Corzo Andaluz se sintió atraído por la profesión de torero desde que era un chaval. A mediados de la década de los años noventa andaba presentándose en cuantas tientas y capeas iban saliendo a su paso. Finalmente, tras varias pruebas de escasa importancia, en 1897 consiguió llamar la atención de los taurinos de su entorno y fue incluido en el cartel de una novillada anunciada en la plaza de Sevilla, donde el joven Manuel Corzo estoqueó su primer novillo. Cayó en gracia, a partir de entonces, a su paisano el matador de reses bravas Antonio Fuentes y Zurita, que por aquel entonces andaba colocado en los primeros puestos del escalafón. Fuentes, promociono la carrera del joven Corzo, consiguió que fuera anunciado en un cartel en las arenas madrileñas, a través de las cuales hizo el paseíllo el día 30 de enero de 1898, en unía corrida en que rejoneó Badila, acompañado del joven novillero José Pascual ("Valenciano"). Se jugaron aquella tarde reses procedentes de los hierros de don Félix Gómez y de Bertólez, frente a las cuales anduvo muy valiente y eficaz Manuel Corzo en el manejo de capa y muleta, si bien falló a la hora de ejecutar la suerte suprema.
Foto de Fuentes y Corcito con sus  cuadrillas el dia de la alternativa de este ultimo

El día 29 de junio de aquella temporada de 1898 Antonio Fuentes y Zurita contrató al joven Manuel Corzo de sobresaliente en un festejo en el que el maestro había de enfrentarse en solitario a seis reses de la ganadería de Biencinto. Fuentes resultó violentamente atropellado por el tercero de la tarde, que le propinó un fuerte golpe en el pecho. Ante la imposibilidad de que el maestro continuase sobre la arena, Manuel Corzo Andaluz asumió la responsabilidad de liquidar ese tercer toro y los tres que aún aguardaban en los corrales. La severa afición de la Villa y Corte valoró en mucho esta prueba de madurez de "Corcito", quien, aunque no brilló a una gran altura artística, supo mantener el tipo y conservar la sangre fría durante la lidia y muerte de cuatro reses bravas, en la plaza de toros de Madrid, sin haber tomado la alternativa.
Corcito con el toro de la alternativa

Al término de dicha temporada decidió cruzar el Atlántico y establecerse en México, país del que ya no habría de regresar. En Ultramar, amparado también por el renombre de que gozaba allí Antonio Fuentes, consiguió algunos contratos que acabaron permitiéndole tomar la alternativa, en una ceremonia que se verificó el día 4 de febrero de 1900, en la plaza de la capital azteca, donde se anunciaron 4 reses criadas en las dehesas de El Cazadero Y 2 de Miura siendo que 1 de las de Miura lo fue del hierro de Càmara para Antonio Fuentes y Enrique Vargas “Minuto” que no actuo por enfermedad siendo sustituido por “Corcito” que seria alternativado. Feliz por la acogida que le deparó el público de México, contrajo nupcias y se instaló definitivamente allí, para tomar parte en las diferentes ferias del país que se sucedieron durante la primera década del siglo XX.
El día 23 de octubre de 1910, cuando toreaba en las arenas de San Luis de Potosí, acompañado por el diestro charro Manuel Lavín ("Esparterito"), fue gravísimamente corneado por un toro marcado con el hierro de Agostadero. El toro que le cogió fue el tercero de los que le correspondía estoquear, lo engancho al torearle de muleta y le volteó horriblemente entre los cuernos, sin que los individuos de la cuadrilla pudieran prestarle auxilio. El público, sobrecogido .de espanto, abandonó la plaza en su mayoría. Los médicos que asistieron al espada le apreciaron una herida de 35 centímetros en la región glútea penetrante en la cavidad peritoneal y en vista de la gravedad de su estado hubo que aplicarle una inyección de estricnina. Fray Benigno Arias y fray Manuel da los Ángeles concedían al pobre torero los auxilios espirituales. 
Durante los tres días que estuvo luchando entre la vida y la muerte se le pusieron varias inyecciones de suero artificial y se le sondó varias veces; pero todo fue inútil. Trasladado con cuidados inmensos a la clínica del Dr. Joaquín Rodríguez, ésta procedió a la canalización de las heridas, ayudado por los Dres., Quijano, Sobara, Páramo y Gómez, Durante la noche durmió algo. Se le sondó varias veces, expeliendo el orín sanguinolento en absoluto El espada murió entre horribles dolores rodeado de sus compañeros. Manuel Corzo (Corcito), a quien algunos confundieron con su hermano José, qué vivía en Sevilla. Hacía bastante tiempo que se encontraba en México, donde se sostenía difícilmente actuando en corridas económicas. Sucumbió a los cuatro días, después de horribles sufrimientos. A pesar de esto, mostró en sucesivas corridas que sabía torear y que, si no era; un gran estoqueador, tenía algo que hacía a los públicos que le aplaudieran. Hacía ya algunos años que marchó a América, y, por tanto, que no toreaba en España.





Dato curioso: El pintor y escenografo mexicano Antonio M. Ruiz (1892-1964) era conocido por sus amigos como "El Corzo" o "El Corcito", a causa de su parecido con el célebre torero Manuel Corzo Andaluz.