jueves, 11 de junio de 2020

EL JEREZANO


Manuel Lara Reyes, hijo del banderillero Luis Lara “El gato”, hermano de José Lara "Chicorro" y de Teodora Reyes, nació en Jerez de la Frontera (Cádiz) el 08 de Diciembre de 1867,siendo bautizado en la parroquia de San Miguel. Su familia procedía de la localidad gaditana de Algeciras.
Manuel Lara,fotografía coloreada por mi

Después de ser aprendiz de tonelero, entró de ayudante en la casa Matadero, en la cual demostró grandes aptitudes para sortear a las reses bravas. Allí se desarrolló su afición, y con el apodo del Gato, comenzó a torear como matador y banderillero en tientas y capeas La primer novillada formal en que tomó parte fue en Jerez de la Frontera el año 1889, alternando con Lobito y Potoco, y lidiándose ganado de D. Pedro Manjón. En Sevilla (según Sánchez de Neira), debutó el 15 de Agosto de 1890, y en igual fecha de 1891 se presentó en Madrid con el apodo de Chicorro, al propio tiempo que Feliciano Benegas, el Toledano, lidiándose reses de Udaeta y Medrarlo. Gustó mucho la labor de Manuel, y entonces comenzó su popularidad, agrandada enormemente con el triunfo conquistado en la plaza de Madrid el 08 de Septiembre de 1896, en cuya fecha, alternando con Machaquito y Maera , en la lidia de seis veraguas, pasaportó al segundo de un modo excepcional: después de un hermoso cambio, un natural, un alto, uno de pecho y otro alto, dio, recibiendo en toda regla, una estocada colosal. Tomó la alternativa en Barcelona el 29 de Octubre de 1899, de manos de su tío José Lara, Chicorro, en situación de retiro y contando ya con 60 años, siendo Cordelero, núm. 72, negro meano, de D. Filiberto Mira, el primer toro que mató. En Madrid confirmó la suprema investidura el 18 de Marzo de 1900.Quinito le cedió el toro Regalón, negro, de Arribas Hermanos. (Dicho día se lidiaron tres toros de Arribas y tres de D. Víctor Biencinto, por las cuadrillas de Quinito y Jerezano.) Como matador de toros, y por causas que ignoramos toda vez que Lara era valiente y ejecutaba algunas suertes a la perfección, no llegó a torear ningún año ni una docena de corridas, habiendo efectuado viajes a América los años 1904,905, 906, 907, 908, 909 y 910.Jerezano sufrió en su vida torera algunas cornadas de importancia; el bautismo de sangre le tuvo el 05 de Octubre de 1894, en Llerena, toreando con Lesaca, donde "Jilguerito", de Anastasio Martín, corrido en segundo lugar, le ocasionó una herida de siete centímetros en la axila derecha, de bastante gravedad, a pesar de lo cual, el diestro despachó los toros que le correspondían. En Jerez, el 15 de Junio de 1895,un toro de Halcón le dio un puntazo en el pecho; el 15 de Agosto del mismo año y en el mismo ruedo, un toro de Cámara (López Plata en otras lecturas) dio a Jerezano una cornada en la región inframaxilar derecha, penetrando por la boca e interesándole la lengua, en los años 70, le contaba al escritor jerezano Juan de la Plata su hija Soledad que, gracias a su valor y sangre fría, Manuel Lara tiró del cuerno y logró sacárselo, pasando a la enfermería gravemente herido, aunque había salvado la vida. Estas y tres cornadas sufridas en La Unión (27 de Mayo de 1897), Madrid (10 Septiembre de 1905) y Jerez de la Frontera (29 Abril de1910), son los principales percances que tuvo con los toros “Jerezano”.
30 Septiembre de 1895 litografía de La Lidia "cogida de Jerezano en Jerez

En la temporada española de 1912 las cosas no le fueron bien a Jerezano, a pesar de que había alternado con las figuras más importantes de su tiempo, decidió marchar a trabajar a México, donde tan bien le había ido otras veces, toreo el 28 de septiembre de aquel año en la capital de la república y el día 06 de octubre acudió a Veracruz, donde le salió una corrida, que sería la última de su vida, en la que debieron lidiarse cuatro toros de Nopalapan por los matadores Manuel Lara “Jerezano” y Eduardo Leal “Llaverito”. De los seis encerrados, y que antes habían sido sorteados, se designaron cuatro, el primero que salió fue retirado al corral por manso, siendo sustituido por otro, que debió ser uno de los dos que habían quedado como de reserva; pero no fue así, sino por el que tenía que jugarse en tercer lugar, que también fue retirado, saliendo a sustituirle el segundo, que le correspondía a Llaverito, que salió abanto y con muchos pies.
Jerezano se situó en los medios, y al darle el primer lance de capa, fue cogido y lanzado a gran altura. El toro siguió su carrera, y Jerezano se levantó quejándose de fuertes dolores en el vientre, ingresando en la enfermería. La corrida continuó, y "Llaverito" tuvo una gran tarde, toreando muy bien y matando con aplausos los cuatro toros. Jerezano fue conducido en seguida al «Hotel Diligencias», donde fueron a visitarle Morenito de Algeciras, Torquito y Farfán, que hablan llegado a este puerto de paso para la capital a cumplir con unos contratos.
Jerezano hacia 1910

A las primeras horas de la mañana del día siguiente, se le presentó una peritonitis, y a las nueve y media del día 08, dejó de existir el diestro Jerezano. En seguida se telegrafió el suceso a la casa Domecq, de Jerez, y cuando el cadáver fue trasladado al establecimiento de Beneficencia Española, ya estaba allí la orden del embalsamamiento del difunto, operación que fue realizada por los doctores Mauro Loyo, Ismael Cadenas, Jorge Ruiz y Rafael Cuervo. Treinta y siete días después del suceso, el 15 de noviembre del mismo año, el corazón de su padre, ” el gato”, el antiguo banderillero, dejo de funcionar, quien sabe si por tantos sinsabores o por que le había llegado su hora nunca llego a ver el regreso de Manuel Lara. La asociación de auxilios mutuos del toreo, entrego a su viuda Eduarda Salguero, las 1000 pesetas que por derecho le correspondían.


Jerezano alternativando a Gaona





Sus restos, mortales fueron embarcados en el trasatlántico “Buenos Aires” el cual, procedente de la Habana y Nueva York arribo al puerto de Cádiz el 22 de Diciembre de 1912, al día siguiente, trasladado el ataúd que contenía los restos mortales de Jerezano a hombros desde el muelle hasta la estación de trenes, con destino a Jerez, por amigos y aficionados, la prensa de la época da detalles; “La caja, que pesa 140 kilos, tiene en la tapa una cruz negra, sobre cuyos brazos se lee el nombre del infortunado diestro” fue depositado en el tren mixto que hacia el recorrido entre las dos localidades andaluzas. Jerezano fue enterrado en el cementerio antiguo de Jerez en medio de una imponente manifestación de duelo. 



Su hija, manifestó años después que "los tres grandes amores de su padre fueron la familia, Jerez, su pueblo, y su afición a los galgos. Era persona muy humilde, sencilla y simpática, así como de carácter formal, lo que le hizo contar con numerosos amigos, en todos los estamentos sociales. Entre ellos su padrino José Domecq,el marqués de Domecq, que gestionaría la traída de su cuerpo a Jerez", donde tiene una calle a su nombre.“Jerezano” fue un torero seguro,completo,con dominio de la suerte suprema y gran rehiletero.
«La mar se vistió de luto,
las gitanas lloran de pena,
los calés guardan silencio
allá en el altozano
porque ha muerto “Jerezano”»
Fuentes: El Toreo (Madrid. 1874). 28/10/1912, página 2, El Heraldo de Madrid. 6/12/1912, página 5, La Correspondencia de España. 22/12/1912, n.º 20.038, página 2, El Imparcial (Madrid. 1867). 23/12/1912, página 2, Tres toreros sin fortuna: 'El Jerezano', De la Rosa y Venturita Diario de Jerez, Juan de la Plata 01 Febrero, 2011, Revista Semanal Ilustrada. Numero 80 Madrid, 13 de octubre de 1912.

No hay comentarios:

Publicar un comentario